viernes, 6 de julio de 2012

DE LA OSCURIDAD AL ALBA: SOCIALIZACION DE LA MEDICINA Y UNIVERSIDAD.

DE LA OSCURIDAD AL ALBA: SOCIALIZACION DE LA MEDICINA Y UNIVERSIDAD.:          
Por:   Guillermo Melendez.      Antes del implacable avance del capitalismo depredador el estudio y practica de la medicina se circunscribía a la formación del medico integro. El maestro transmitía a sus discípulos no solo el arte de la curación sino que también se esmeraba en inducir los valores mas fundamentales del hombre y la mujer como lo es la vida, la igualdad, la convivencia, solidaridad, la honradez, respeto, la justicia, tolerancia, entre otros, que en suma elevaría la condición humanística del medico de entonces, valores supremos que le alejaban de practicas insanas e impropias a su juramento y le aproximaban, sin condición alguna, a aliviar la queja de los mas necesitados; el valor de cambio no se contemplaba sino el valor de servir con abnegación.

     Las sociedades modernas enmarcadas dentro del capitalismo han soslayado, sistemáticamente, esta formación necesaria e integra del medico; en ellas las universidades tradicionales, paridas por estas sociedades, han sido en gran medida elemento propiciador de la practica de la medicina sujeta al valor de cambio; el dolor y la necesidad de las personas es, desde bien avanzado el siglo XX , un objetivo del mercado por lo que el estudiar la medicina seria sustancioso para quien tenga una visión mercantilista del ejercicio medico; por ello leemos y oímos la opinión de que la sociedad moderna es una sociedad en decadencia y mezquina por cuanto no le asegura a sus miembros el mayor bienestar posible a todos, sin excepción; el mercado y la industria medica es para quien puede pagarlo configurando, de este modo, un escenario de desigualdades e injusticias y  dejando entrever que la idea del capitalismo, en cuyo vientre se gestan esas superestructuras inhumanas, es una idea totalmente errónea por cuanto no satisface a las mayorías y ya es tiempo de desideologizar la mayor farsa de la que ha sido victima la humanidad.


     A pesar de que las universidades tradicionales marchan paralelas al avance de la ciencia y la investigación, no es incorrecto  decir que las mismas han sido un sustrato de la clase dominante. Ello ha permitido, para ser justo, el positivismo científico necesario para desarrollar sociedades humanísticas, pero por otro lado han generado, dada su funcionalizacion al capital, una relación desproporcionada entre las necesidades insatisfecha de las mayorías a servir y el ejercicio del servidor que de allí egresa. Por otro lado es insostenible para una sociedad que sus universidades y programas de investigación estén tutelados por las grandes corporaciones y el resultado del rigor científico vaya a parar al mercado en desmedro, siempre o casi siempre, de las grandes mayorías;¿ porque no hacer del conocimiento y la investigación científica un patentado de la humanidad?, que todo descubrimiento en aras de la salud y el bienestar tenga viso de legado humano y, por tanto, ningún mercado pueda hacer uso del descubrimiento para sostenerse en las bolsas; los descubrimientos y el conocimiento debe ser potestativo de la humanidad para que esta tenga acceso al mismo.


     A pesar de la autonomía de que gozan las universidades las mismas han sido politizadas por la clase dominante para que sirvan a la dependencia directa del capitalismo subdesarrollado e indirectamente al sobredesarrollado o fase superior del capitalismo, la fase en donde tienen aposento las grandes corporaciones que crecen y crecen a expensas de las enfermedades del hombre; es entonces cuando preguntamos, ¿ realmente la academia gradúa médicos íntegros mas allá del conocimiento científico?, por lo visto no es así, al contrario, cada vez es mas notorio la dicotomia del medico en su ejercicio a la hora de atender a un paciente del sector publico o bien del privado. Indudablemente que las jóvenes promociones a medida que desarrollan el conocimiento la prestancia se concreta en calidad y buena atención para la clase dominante quien si puede pagar  la bondad conque se les atiende. Esta clase dominante se ha asegurado, por siglos, que sus universidades bajo la modalidad del "claustro" fomenten la domesticación de los miembros para servir a la sociedad capitalista.


     Esta decadencia expresada en la imposibilidad de que el gran capital le de soluciones a los grandes problemas de la humanidad es el pre aviso de lo que ocurrirá en este mismo siglo. Puede esta ideología, a pesar de vanagloriarse de grandes logros,  sostener y garantizar la vida en el planeta?; realmente no puesto que  cien años es mas que suficiente para concretar esta idea propiciada por los ideologos europeos a principios del siglo XX ante el avance de las corrientes contrarias. No puede una ideología sostenerse en un planeta de aproximadamente 7.000 millones de humanos de donde 1.100 millones son de una pobreza proximal a la muerte. No puede sostenerse una ideología en donde bajo su tutela mueren 35.000 personas diariamente por causa de la pobreza y de ellos 19.000 son niños. Ah pero esto no importa en el gran capital por cuanto no es interés ni suma para lo que fue hecho.

miércoles, 4 de julio de 2012

SOCIALIZACION DE LA MEDICINA Y UNIVERSIDAD.

Por: Guillermo Melendez.

     Antes del implacable avance del capitalismo depredador el estudio y practica de la medicina se circunscribía a la formación del medico integro. El maestro transmitía a sus discípulos no solo el arte de la curación sino que también se esmeraba en inducir los valores mas fundamentales del hombre y la mujer como lo es la vida, la igualdad, la convivencia, solidaridad, la honradez, respeto, la justicia, tolerancia, entre otros, que en suma elevaría la condición humanística del medico de entonces, valores supremos que le alejaban de practicas insanas e impropias a su juramento y le aproximaban, sin condición alguna, a aliviar la queja de los mas necesitados; el valor de cambio no se contemplaba sino el valor de servir con abnegación.

     Las sociedades modernas enmarcadas dentro del capitalismo han soslayado, sistemáticamente, esta formación necesaria e integra del medico; en ellas las universidades tradicionales, paridas por estas sociedades, han sido en gran medida elemento propiciador de la practica de la medicina sujeta al valor de cambio; el dolor y la necesidad de las personas es, desde bien avanzado el siglo XX , un objetivo del mercado por lo que el estudiar la medicina seria sustancioso para quien tenga una visión mercantilista del ejercicio medico; por ello leemos y oímos la opinión de que la sociedad moderna es una sociedad en decadencia y mezquina por cuanto no le asegura a sus miembros el mayor bienestar posible a todos, sin excepción; el mercado y la industria medica es para quien puede pagarlo configurando, de este modo, un escenario de desigualdades e injusticias y  dejando entrever que la idea del capitalismo, en cuyo vientre se gestan esas superestructuras inhumanas, es una idea totalmente errónea por cuanto no satisface a las mayorías y ya es tiempo de desideologizar la mayor farsa de la que ha sido victima la humanidad.


     A pesar de que las universidades tradicionales marchan paralelas al avance de la ciencia y la investigación, no es incorrecto  decir que las mismas han sido un sustrato de la clase dominante. Ello ha permitido, para ser justo, el positivismo científico necesario para desarrollar sociedades humanísticas, pero por otro lado han generado, dada su funcionalizacion al capital, una relación desproporcionada entre las necesidades insatisfecha de las mayorías a servir y el ejercicio del servidor que de allí egresa. Por otro lado es insostenible para una sociedad que sus universidades y programas de investigación estén tutelados por las grandes corporaciones y el resultado del rigor científico vaya a parar al mercado en desmedro, siempre o casi siempre, de las grandes mayorías;¿ porque no hacer del conocimiento y la investigación científica un patentado de la humanidad?, que todo descubrimiento en aras de la salud y el bienestar tenga viso de legado humano y, por tanto, ningún mercado pueda hacer uso del descubrimiento para sostenerse en las bolsas; los descubrimientos y el conocimiento debe ser potestativo de la humanidad para que esta tenga acceso al mismo.


     A pesar de la autonomía de que gozan las universidades las mismas han sido politizadas por la clase dominante para que sirvan a la dependencia directa del capitalismo subdesarrollado e indirectamente al sobredesarrollado o fase superior del capitalismo, la fase en donde tienen aposento las grandes corporaciones que crecen y crecen a expensas de las enfermedades del hombre; es entonces cuando preguntamos, ¿ realmente la academia gradúa médicos íntegros mas allá del conocimiento científico?, por lo visto no es así, al contrario, cada vez es mas notorio la dicotomia del medico en su ejercicio a la hora de atender a un paciente del sector publico o bien del privado. Indudablemente que las jóvenes promociones a medida que desarrollan el conocimiento la prestancia se concreta en calidad y buena atención para la clase dominante quien si puede pagar  la bondad conque se les atiende. Esta clase dominante se ha asegurado, por siglos, que sus universidades bajo la modalidad del "claustro" fomenten la domesticación de los miembros para servir a la sociedad capitalista.


     Esta decadencia expresada en la imposibilidad de que el gran capital le de soluciones a los grandes problemas de la humanidad es el pre aviso de lo que ocurrirá en este mismo siglo. Puede esta ideología, a pesar de vanagloriarse de grandes logros,  sostener y garantizar la vida en el planeta?; realmente no puesto que  cien años es mas que suficiente para concretar esta idea propiciada por los ideologos europeos a principios del siglo XX ante el avance de las corrientes contrarias. No puede una ideología sostenerse en un planeta de aproximadamente 7.000 millones de humanos de donde 1.100 millones son de una pobreza proximal a la muerte. No puede sostenerse una ideología en donde bajo su tutela mueren 35.000 personas diariamente por causa de la pobreza y de ellos 19.000 son niños. Ah pero esto no importa en el gran capital por cuanto no es interés ni suma para lo que fue hecho.

martes, 19 de junio de 2012

RAZONES PARA LA LUCHA.

Por: Guillermo Melendez 

    En tiempos del negro Miguel y Jose Leonardo Chirinos, en lo que respecta a Venezuela, la sociedad esclavizadora de entonces recibió las primeras muestras de rechazo a lo que ha significado la opresión del hombre por su propia especie, razón constante para el mantenimiento de las luchas en aras de labrar el hombre nuevo que sea capaz de sostener el equilibrio que la justicia teóricamente ofrece. No en vano han ocurrido esas luchas por las que nuestros antepasados, originarios, precursores y forjadores de la Patria libre y soberana, desgarraron sus carnes al ofrendar sus vidas ante la barbarie.
     Hoy palpamos luchas semejantes con escenarios distintos en cuyo fondo esta materializado, aun, la dominación; sin embargo, sabemos del avance de los movimientos populares en toda Latinoamerica que cada día se hace mas ostensibles con resultados prometedores para este hemisferio. Y mas allá, allende los mares, también están despertando sociedades ante una crisis que erosiona los estratos mas vulnerables de la población europea y ni se diga lo que acontece con los in dignados asentados al norte del Río Bravo. Todo es indicativo que las voces se multiplican en contra de una minoría dominante que solo genera hambre y pobreza, razón para sincronizar estos con aquellos esfuerzos y en alzada ir incorporándolos a redefinir un nuevo orden que encoja la brecha de desigualdades, de esta manera habrá paz y garantía de sobrevivencia de la especie humana.
     De este modo la insurgencia de las masas viene tomando cuerpo en el contexto de lo que significa la liberación del hombre en toda su dimensión, así como su justificado afán en la procura de un bienestar adecuado a su esfuerzo como recompensa. Deconocer  la insurgencia de las masas como fenomeno social imanente a las desigualdades seria como desconocer que el gran capital, como ideología, no ha resuelto los grandes problemas de la humanidad, al contrario, los ha agravado y mas de una centuria parece suficiente para dar por concluida las expectativas que se tenían de esta idea. Basta con ver lo que ocurre en los países europeos en donde todos han puesto sus "barbas en remojo" ante la quiebra de los helenos y el "grito" reciente de la viaja España pidiendo auxilio a quien le ahorca, el sistema capitalista.
     Por esta razón la lucha persistirá hasta tanto la sociedad entienda que todos sus miembros tienen el mismo derecho pero que para llegar de hecho a ese estado debe existir la cooperación mancomunada de dichos miembros. Mientras no se llegue a esa condición de equidad con constancia habrá eclosión de la queja, tal como viene ocurriendo hasta en las sociedades mas conservadoras como las de la vieja Europa.
     Necesario es, entonces, el discurso que anime y mantenga el nivel de lucha el cual no debe confundirse con las precarias protestas de sectores reaccionarios, precarias por el pobre contenido de la motivación pero peligrosas por los medios que utilizan para acometer sus objetivos, máxime si estos están alentados por factores externos o ajenos al interés de las masas excluidas de un contrato social justo. El contexto que implico las luchas de ayer sigue señalado en las luchas de hoy; los cambios van a depender del nivel de lucha y la sostenibilidad de esta como contraparte de la dominación.